Las primeras aulas hospitalarias surgen por los años
cincuenta,con el objetivo de resolver los problemas de escolaridad de los
niños que, durante un periodo de tiempo más o menos largo, tienen que dejar de
asistir al colegio de forma regular.
El primer país que dio sus primeros pasos hacia la educación
de los niños hospitalizados fue Francia. Será hacia el año 1965 cuando se
plantea la necesidad de ayudar a los niños, no solo desde el punto de vista
médico, sino también desde el escolar. Esto dio lugar a que, poco a poco, se
fueran abriendo diversos hospitales en diferentes puntos de España. En un
principio, los objetivos de estas aulas hospitalarias eran entretener a los
niños más que enseñarles los contenidos
que se impartían en las escuelas.
A raíz de la apertura del Hospital Nacional de Parapléjicos
de Toledo en el año 1974, se puso en marcha una Sección de Pedagogía, cuyo
objetivo era atender las necesidades
educativas de niños y mayores hospitalizados cubriendo las demandas que
cada vez más, solicitaba la sociedad española.
La primera ley que habla de la necesidad y el derecho de las
personas hospitalizadas a recibir atención educativa fue la Ley de Integración
Social del Minusválido (LISMI, 1982). De esto mismo habla el Real Decreto 334/1985
de Ordenación de la Educación Especial.
Tanto en España como en el resto de Europa se estaba hablando en
aquella época sobre las actividades que se debían desarrollar en los hospitales
con los niños ingresados, todas ellas se recogen en la Carta Europea de los
Derechos del Niño Hospitalizado, aprobada por el Parlamento Europeo en 1986.
En 1990 la LOGSE insistió en la necesidad de la atención
compensatoria para así evitar desigualdades.
El Real Decreto 696/1995, de ordenación de la educación de
los alumnos con necesidades educativas especiales, establece que “el Ministerio
de Educación y Cultura promoverá la creación, en los centros hospitalarios y de
rehabilitación, de los servicios escolares para el adecuado desarrollo del
proceso educativo de los alumnos de educación infantil, educación primaria y
educación secundaria obligatoria”.
El Real Decreto 299/1996, de ordenación de las acciones
dirigidas a la compensación de desigualdades en educación, en el apartado
referido a la actuación educativa con los niños hospitalizados establece: “el
alumnado hospitalizado mantendrá su escolarización en el centro ordinario en el
que se desarrolle su proceso educativo”, así como que “ El Ministerio de Educación y Cultura creará
unidades escolares de apoyo en los centros hospitalarios sostenidos con fondos
públicos que mantengan regularmente hospitalizado un número suficiente de
alumnos en edad de escolaridad obligatoria. Además, y a petición de
instituciones hospitalarias de titularidad privada, podrán formalizar convenios
para la concentración de unidades escolares de apoyo”.
En mayo de 1998, el Ministerio de Educación y Cultura, el
Ministerio de Sanidad y Consumo y el Instituto Nacional de la Salud, firmaron
un convenio en el que sentaron las bases para resolver la escolarización de los
niños convalecientes o ingresados en centros hospitalarios, de tal manera que
esa situación no sea un impedimento para su formación educativa.
La Ley
Orgánica 2/2006 de Educación defiende la necesidad de la atención a la
diversidad y de la atención educativa en los hospitales.
·
RESPECTO
AL HOSPITAL
-
Impulsar
la coordinación y colaboración de la Consejería de Educación y Cultura y la
Consejería de Sanidad, así como con otras administraciones, instituciones,
asociaciones para el desarrollo de acciones de compensación.
-
Incentivar
que el hospital tenga una buena organización tanto en espacios como en tiempo.
-
Buena
comunicación y coordinación entre el personal sanitario.
·
RESPECTO
A LOS NIÑOS HOSPITALIZADOS
-
Que
los niños adquieran y desarrollen habilidades para enfrentarse a la nueva
situación.
-
Proporcionar
información adecuada para impedir sufrimientos y malentendidos sobre las
enfermedades.
-
Utilizar
materiales didácticos para que los niños adquieran los conocimientos que
correspondan para poder continuar la escolarización de los niños.
-
Atender
de manera individualizada a cada uno de los niños y favorecer el trabajo en
grupo.
-
Impedir
la marginación educativa en los niños.
-
Aceptar
las diferencias de los distintos niños.
-
Intentar
que el periodo de hospitalización sea más ameno para los niños.
·
RESPECTO
A LA FAMILIA
-
Favorecer
la comunicación entre las familias, para que conozcan la situación
psicoemocional de sus hijos y los procesos de enseñanza que se están llevando a
cabo con ellos.
-
Colaborar
para reducir la vulnerabilidad de los padres ante la hospitalización de sus
hijos.
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