Tal y como nos mandó el profesor de
la asignatura Didáctica de la Expresión Plástica en Educación Infantil en las
últimas clases, he buscado un cuadro que contiene los tres elementos configuradores
de la imagen: el punto, la línea y el plano.
Esta obra del
catalán Joan Miró está formada por estos tres elementos y, a su vez, por los
tres colores primarios (rojo, amarillo y azul) más uno secundario, el verde,
que surge como resultado de juntar el azul y el amarillo.
Tanto los
colores como las formas que utiliza en ésta y en la mayoría de sus obras, son
muy llamativos, lo que hace que tanto mayores como pequeños nos fijemos mucho y
nos llame la atención.
El hecho de que
utilice trazos sencillos en sus obras, hace que sea atractivo a la vista de los
niños, lo que fomenta su interés por muchas de ellas.
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